jueves, 26 de julio de 2012

Mujer, ¿qué estilo eres tú?

Por Yadira Márquez





Querámoslo o no, sólo tenemos un cuerpo y estará con nosotros toda la vida. Es mejor aprender cómo lucir todas nuestras cualidades físicas (y ya sé que estás pensando que no tienes muchas, que hay más defectos) y evitar autosabotearnos a nosotras mismas.

Consejos anteriores tales como la elección de color, la forma y medida del cuerpo, la forma y medida de la cara, la proporción, los códigos de lenguaje a través de la vestimenta, son elementos que conociéndolos, pueden ayudarnos a cualquiera de nosotras a lucir mejor, sin embargo hay algo para lo que no hay una regla, algo que no podemos copiar: el estilo de nuestra personalidad.






El estilo es la expresión individual de cada una de nosotras, eso que nos hace únicas y que nos permite distinguirnos de las demás. El estilo no se implementa sólo se produce, es decir es algo que tú ya tienes, es una personalidad forjada a través de los años por medio del carácter, el temperamento, el estilo de vida, profesión y tus gustos personales.
En imagen se habla de 7 estilos que engloban las distintas personalidades:

ESTILO:
Se distingue por:
Cualidad:
Riesgo:
NaturalApariencia SencillaAccesibleFacha
TradicionalApariencia FormalResponsabilidadAnticuado
CreativoApariencia DivertidaInnovadorRidículo
SeductorApariencia SugestivaAtractivoVulgar
RománticoApariencia FemeninaCálidoCursi
DramáticoApariencia DominanteVanguardistaAgresivo
EleganteApariencia ClásicaDistinguidoInaccesible
Como pueden darse cuenta ninguno es mejor o peor que otro sino que cada uno de los estilo puede ser muy benéfico por la cualidad que comunica pero debe cuidar evitar el riesgo.

En las consultorías, siempre les digo a las clientas que el estilo es como una recta que va del 0 al 100. Como dije anteriormente, el estilo se produce, no se crea, es decir, si logras diagnosticar cuál es el estilo con el que más te identificas, lo único que tienes que hacer es decidir en qué escala lo produces dependiendo de la ocasión. Por ejemplo, un estilo natural con 0 producción estaría cayendo en su riesgo: la facha, pero ese estilo natural con escala 60 de producción puede llegar a lucir sumamente bien, adecuado y confiable. Para un evento de gala incluso podría llegar al 100 de producción. La idea es siempre producirse, la cantidad depende del objetivo y de la ocasión.

Por otro lado es importante aclarar que la imagen trabaja tomando en cuenta siempre la personalidad, por lo menos la imagen ética ya que es la única forma de poder implementar un cambio y una imagen efectiva que pueda sostenerse a través del tiempo. No es una farsa, es una producción de la individualidad ya existente.

Piensa en un ejemplo, puedes tener una amiga que suela usar ropa sumamente ajustada y que verdaderamente luzca bien, sin embargo, aunque reconoces que esa falda pegadita se le ve bien, también eres consciente de que si te la prestara, es probable que te sentirías incómoda y peor aún podrías pasar toda una reunión sentada evitando que los demás te vean. ¿Me expliqué?, ¡Eso es estilo! ¡Personalidad! No puedes pretender tener el estilo de alguien más, tú tienes uno propio.

La verdadera forma de lograr que una imagen sea exitosa es encontrando ese toque personal, lo demás lo hemos dicho ya, no es más que el reconocimiento de nosotras mismas, la aceptación y nuestra producción a través de colores, cortes y combinaciones que nos favorezcan.

La imagen es una herramienta poderosa que todas poseemos, el secreto está en adquirir los conocimientos que nos permitan usarla siempre a nuestro favor y como un elemento que facilite cumplir nuestros objetivos. 

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